Los niños reciben tres veces la exposición anual al sol que los adultos y las investigaciones han demostrado que sus pequeños ojos son especialmente susceptibles a los daños relacionados con los rayos UV y la luz azul nociva. A diferencia de los cristalinos maduros del ojo de un adulto, el cristalino de un niño no puede filtrar adecuadamente los rayos ultravioleta, por lo tanto, llega más radiación a la retina.1
Al mismo tiempo, décadas de exposición al sol desde la infancia hacen que los ojos de las personas mayores sean mucho más propensos a tener problemas visuales y enfermedades como pterigio, catarata y degeneración macular relacionada con la edad, entre otras.
Para proporcionar una protección adecuada a los ojos de los niños, se deben utilizar gafas de sol que filtren la luz azul nociva, bloqueen del 99 al 100% de la radiación UV-A y UV-B y que reduzcan el deslumbramiento.
MAYOR EXPOSICIÓN A LAS PANTALLAS
La luz azul nociva y la fatiga visual están a la vanguardia en la conciencia pública debido al mayor uso de dispositivos digitales en los últimos años.
Si bien el origen de la miopía es multifactorial, en estudios realizados en Asia, en donde se evaluaron grandes poblaciones, se observa cómo el aumento de la miopía está relacionado con el uso excesivo de pantallas y la disminución de las actividades en el exterior. La luz es un factor importante en el desarrollo humano y las investigaciones muestran que pasar tiempo al aire libre puede reducir el riesgo de miopía en los niños. Sin embargo, el 50% de los niños pasan menos de una hora al aire libre.2
Sin embargo, el sol es la mayor fuente de luz azul nociva que emite más de 100 veces la intensidad de los dispositivos electrónicos y las pantallas, por lo que es imprescindible también proteger los ojos de los niños durante el tiempo que pasan en exteriores.
Se debe informar a los padres que el tiempo que sus hijos pasan frente a las pantallas y bajo el sol puede afectar sus ojos, por lo que es imprescindible protegerlos de la luz azul nociva.
PROTECCIÓN PARA LOS DEPORTISTAS
Al igual que los cascos protectores, espinilleras y otros equipos; la protección ocular debe ser parte del uniforme. Las gafas adecuadas podrían prevenir el 90%3 de las lesiones oculares relacionadas con el deporte. Por eso es importante recomendar lentes en materiales resistentes a los impactos y monturas de rendimiento deportivo para ayudar a proteger de lesiones, radiaciones UV y luz azul nociva.
ÉXITO EN EL COLEGIO
El 80% del aprendizaje en los primeros 12 años de un niño proviene de los ojos.4 El uso de tableros inteligentes, presentaciones en línea, métodos de prueba digitales y la expectativa de hacer la mayoría de las tareas en una tableta o computador están cambiando las necesidades visuales que tienen los niños. Por eso es importante recomendar los lentes con AR para ayudar a proteger a los niños de la luz azul nociva y proporcionar beneficios significativos para la salud de sus ojos, visión clara y comodidad.
BRINDANDO PROTECCIÓN
Como se ve los anteojos son un artículo esencial en la protección de los niños. Pero no cualquier lente, estos deben absorber los rayos UVA y rayos UVB, filtrar la luz azul nociva y deben cumplir con la calidad y criterios de seguridad establecidos por el American National Standards Institute (ANSI). La protección adicional para exteriores proviene de marcos envolventes o marcos con piezas laterales lo suficientemente grandes como para bloquear el sol desde la mayoría de los ángulos.
Una buena opción para usar en exteriores son los lentes polarizados, pero si no se quiere cambiar de gafas de sol a graduadas, los lentes con tecnología fotosensible tienen la capacidad de proteger la salud ocular infantil tanto en interiores como en exteriores. Un ejemplo son los lentes Transitions, que se adaptan automáticamente a las diferentes condiciones de luz, bloquean el 100% de los rayos UVA y UVB, reducen el deslumbramiento, ayudan a filtrar la luz azul nociva en interiores y especialmente en exteriores, protegen desde el aula y el recreo, hasta las actividades deportivas de fin de semana, estos lentes brindan a los ojos de los niños la protección que necesitan. Además, están disponibles en materiales resistentes a golpes y roturas.
HABLANDO CON LOS PADRES
El 66% de los padres de niños que usan anteojos consideran la recomendación del profesional de la visión como un factor muy importante.5 Por eso es fundamental explicar y resaltar los beneficios de los lentes fotosensibles para los niños.
Como generación que se ha educado en tecnología, los padres de la generación del milenio aprecian un producto que incorpora las últimas innovaciones. También aprecian el valor de los productos que ofrecen beneficios para la salud (protección UV y menor exposición a la luz azul dañina) y mejoran la comodidad para el usuario, que en este caso los niños.
INVOLUCRAR A LOS NIÑOS
Ajuste su estilo de comunicación para conectarse con los niños. Comuníquese con ellos en ráfagas más breves, su capacidad de atención es de solo unos 8 segundos. Utilice un lenguaje amigable para los niños. Los niños de hoy en día tienen sus propias opiniones y tienen más influencia en las decisiones de compra del hogar que las generaciones anteriores. Inclúyalos durante todo el proceso. Alimente su curiosidad ¡No olvide divertirse! Ver al profesional de la visión puede ser una experiencia abrumadora para algunos niños, por eso es importante contar con herramientas que ayuden a crear una experiencia positiva y despertar su curiosidad.
REFERENCIAS
- Truhan AP. Sun protection in childhood. Clinical Pediatrics® 30(12):676-681, 1991.
- Edelman Berland, Unilever’s OMO/ Persil and the Dirt is Good campaign
- Harrison, A., & Telander, D.G. (2002)
- Vision Council, Parent for Child Report. 2012
- Vision Council Visionwatch Parent Child Vision Care Report, Jan. 2016
- https://trade.transitions.com/resources/public/10556/KidsDispensingGuide.pdf