La cirugía refractiva es una de las alternativas más populares para la corrección de los defectos refractivos, especialmente aquellos realizados con láser. En la actualidad, existe un espectro amplio de posibilidades para la práctica de este procedimiento en diferentes tipos de pacientes y de defectos visuales. Sin embargo, también existen ciertas restricciones en diferentes condiciones; entre las cuales se encuentra la presencia de enfermedades autoinmunes. (1)
En este sentido, se ha afirmado que la cirugía refractiva representa un riesgo significativo de complicaciones quirúrgicas en pacientes con enfermedades autoinmunes, debido a la incertidumbre acerca de la respuesta del tejido corneal al proceso de reparación, lo que llevaría a resultados visuales insatisfactorios, irregularidades o alteraciones en el tejido y la respuesta inflamatoria. Por estas razones las enfermedades autoinmunes son consideradas por muchos especialistas como factores de contraindicación. Desafortunadamente, la evidencia para afirmar esto aún es inconclusa, sobre todo por los avances tecnológicos y la seguridad de los procedimientos. (1)
Por lo anterior, Chen y Chu (2024) realizan una revisión de la literatura con el fin de abrir el panorama actual en referencia a la cirugía refractiva y su relación con enfermedades autoinmunes. Con este propósito, los autores comienzan relatando que existen más de 80 enfermedades clasificadas como autoinmunes. Algunas de las más frecuentes son: la artritis reumatoide (AR), el lupus eritematoso sistémico (LES), las espondiloartropatías seronegativas (SpA) y el síndrome de Sjögren.(1)
Con este contexto, estas enfermedades pueden manifestarse a través de una diversidad semiológica, que incluye alteraciones como: conjuntivitis, queratoconjuntivitis sicca, epiescleritis, uveítis, y daños severos como la escleritis necrotizante, queratitis ulcerativa periférica, y perforación corneal. Es más, también se han reportado afecciones en retina, nervio óptico, y estructuras perioculares gracias a la autoinmunidad. (1)
Considerando esta situación, los pacientes que tienen enfermedades autoinmunes y se someten a cirugías intraoculares tienen mayor riesgo de sufrir estas complicaciones; por ejemplo, se han reportado casos de necrosis corneal y escleritis necrotizante posteriores a cirugía de cataratas en personas con AR y síndrome de Sjögren secundario. (1)
Ahora bien, entrando en el mundo de la cirugía refractiva y las complicaciones que pueden surgir tras enfermedad autoinmune, los autores indican que no hay claridad de la situación, ya que se han publicado escasos reportes donde se observan alteraciones como úlcera corneal perforante no infecciosa, y cicatrización corneal, sobre todo en pacientes con LES. En contraste estudios como el de Alió y colaboradores (2005) muestran que en pacientes con diferentes enfermedades autoinmunes como AR, LES, dermatomiositis, esclerodermia, espondilitis anquilosante, artritis psoriásica, enfermedad de Crohn, colitis ulcerosa y enfermedad de Behçet, no existen complicaciones y los pacientes mantienen la salud ocular posterior a la cirugía refractiva, si existe un riguroso control sistémico previo y posterior al procedimiento. (1) (2)
Acorde con lo anterior, Schallhorn y colaboradores (2016) realizan un estudio con el fin de evaluar los resultados refractivos y visuales, así como las complicaciones postoperatorias en pacientes con enfermedades inflamatorias mediadas por el sistema inmunológico y de colagenopatías bien controladas, concluyendo principalmente que la cirugía con excimer láser puede realizarse de forma segura en pacientes con estas características, sin complicaciones, buenos resultados visuales, y mantenimiento de la salud ocular a través del tiempo. (3)
Por otra parte, faltaba nombrar una de las alteraciones más esperadas en personas con enfermedades autoinmunes, y se trata del ojo seco. De hecho, es la complicación más común posterior a la cirugía refractiva. Por ejemplo, en pacientes con AR y LES se ha observado que hasta un 25% de los pacientes pueden presentar síndrome de Sjögren secundario. También se han reportado casos de defectos epiteliales corneales. Tampoco pueden faltar los reportes de disminución de la calidad de la película lagrimal en diferentes casos de autoinmunidad. No obstante, también se ha mostrado que el paciente mejora con los medicamentos destinados a lubricar la superficie ocular posteriores al procedimiento. (1)(2) (3)
Con los análisis derivados de la revisión de los autores, estos concluyen que las enfermedades autoinmunes se consideran tradicionalmente contraindicaciones para la cirugía refractiva, especialmente los procedimientos realizados con láser, incluso si existen investigaciones que abordan una cantidad importante de pacientes que sugieren seguridad para efectuar el procedimiento. Tal vez este tipo de reportes tenían la característica de mostrar la evolución exitosa de pacientes con el debido control de la enfermedad sistémica. Sin embargo, prácticamente esta es la mayor recomendación para el éxito.(1)
En contraste, las complicaciones observadas se derivan de pacientes sin el debido control de la patología autoinmune de base. Los autores a manera personal sugieren que la cirugía refractiva con láser se puede realizar de manera segura y eficaz en pacientes con enfermedades autoinmunes, siempre que la enfermedad esté inactiva, bien controlada y no tenga manifestaciones oculares. (1)
Es importante aclarar que aún los datos clínicos son insuficientes, pero se debe resaltar que los pacientes con síndrome de Sjögren primario pueden definitivamente no ser los candidatos ideales para la cirugía refractiva, ya que los síntomas de ojo seco pueden verse exacerbados, por causa de la enfermedad autoinmune y por el mismo procedimiento. Los cirujanos entonces deben garantizar el adecuado control sistémico y ocular preoperatorio antes de decidir practicar cirugía refractiva bajo la sombra de la autoinmunidad. (1)
Referencias
- Chen TY, Chu DS. Refractive surgery for patients with autoimmune diseases. Vol. 31, Current Opinion in Ophthalmology. Lippincott Williams and Wilkins; 2020. p. 247–52.
- Alió JL, Artola A, Belda JI, Perez-Santonja JJ, Muñoz G, Javaloy J, et al. LASIK in patients with rheumatic diseases: A pilot study. Ophthalmology. noviembre de 2005;112(11):1948–54.
3. Schallhorn JM, Schallhorn SC, Hettinger KA, Venter JA, Pelouskova M, Teenan D, et al. Outcomes and complications of excimer laser surgery in patients with collagen vascular and other immune-mediated inflammatory diseases. J Cataract Refract Surg. el 1 de diciembre de 2016;42(12):1742–52.