Las lesiones por descarga eléctrica no son un mito, pues cualquier persona está en contacto con la electricidad en la vida diaria. El peligro más grande que representan estos accidentes ya sean caseros u ocupacionales, es el de perder la vida. Cuando existe supervivencia a descargas de alto voltaje, pueden existir secuelas oculares como la catarata. En muchos casos, las alteraciones visuales no se manifiestan en períodos tempranos posteriores al accidente, el desarrollo de catarata puede darse varios meses posteriores al evento desafortunado. En términos generales, se puede afirmar que el desarrollo de catarata posterior a un choque eléctrico es variable, y se puede manifestar a través de zonas de densidad con apariencia de vacuolas arciformes con disposición concéntrica, que abarcan desde la periferia hasta la cercanía del ecuador. También se ha reportado ubicación subcapsular anterior y posterior, y, en otros momentos, se ha descrito una morfología cupuliforme posterior con destellos brillantes. (1)(2)
Teniendo en cuenta lo delicada que puede ser la catarata después de un accidente con alto voltaje, más atención debe llamar el hecho de la misma causa. Por esta razón, se presentarán algunos casos reportados en la literatura, para generar una consciencia preventiva.
Khatib et al 2017, reportó el caso de un paciente masculino de 43 años que consulta por disminución de visión lenta y progresiva en el OD hace años. Como antecedente principal, el paciente fue alcanzado por un rayo años atrás, por lo cual ya se le había operado el OI. A la biomicroscopía se observó una catarata subcapsular con múltiples vacuolas con opacidades puntiformes y en cuadrícula. La teoría de la formación de este tipo de catarata, es que el cristalino tiene un alto porcentaje de agua (60%), y para mantener su transparencia, requiere un alto intercambio de electrolitos, que le confieren una alta conductividad eléctrica. También se afirma que el ojo más afectado, es el más cercano al punto de entrada de la descarga. Ver figura 1. (3)
Figura1. Catarata subcapsular posterior a impacto por rayo. Nótese la presencia de vacuolas densas.
Kumawat et al 2017 reporta un caso de un paciente masculino de 55 años cuya pérdida visual se da bilateralmente. El paciente sufrió una descarga por contacto directo con un cable de alta tensión (11000V) en sus manos 18 meses atrás. El paciente se encontraba en el trabajo reparando un transformador. En el examen físico se encontraron las cicatrices por la quemadura cuya entrada se dio en la palma izquierda, y la salida, en la parte ventral de la pierna izquierda. La visión se redujo a tal punto de ver movimiento de manos en OD y cuenta dedos en OI. El examen reveló en el ojo derecho una ruptura capsular y catarata nuclear en un cristalino dislocado posteriormente. El ojo izquierdo reveló una catarata subcapsular anterior con esclerosis nuclear. Afortunadamente posterior a la cirugía, el paciente recuperó agudeza visual a 20/30 en ambos ojos. Lo llamativo de este caso fue la supervivencia del paciente y la ruptura capsular. Ver figura 2.(4)
Figura 2. A la izquierda, cicatrices de entrada y salida de la corriente eléctrica. A la derecha. Ecografía que muestra dislocación posterior del cristalino en cavidad vítrea. (4)
Otro caso a presentar, es el de Korkmaz et al 2020, que se trata de un paciente masculino de 32 años que consulta por pérdida visual en ambos ojos, con antecedente de accidente que proporcionó una descarga de alto voltaje en la cabeza hace 2 meses, que le dejó una cicatriz en la región temporal izquierda del cuero cabelludo y una alopecia en la zona. La disminución visual correspondía a 0.3 en OD y movimiento de manos en OI. El examen reveló una catarata cortico-nuclear en OD y madura en OI. Adicional a la catarata, se observó agujero macular en OD. Posterior a la cirugía de catarata en OI por tener la peor visión, éste no mejoró debido a la presencia de atrofia óptica. Este caso representa más alarma, ya que acompañado de la catarata, el choque eléctrico puede generar alteraciones graves en el polo posterior que comprometen la visión de manera permanente. Ver figura 3. (5)
Figura 3. A la izquierda, catarata madura en OI. A la derecha. Atrofia óptica de OI. (5)
Con los casos presentados anteriormente, se mostraron diferentes escenarios, donde los accidentes con alto voltaje abarcan diferentes edades, causas, y consecuencias. En este aspecto, la salud laboral cobra mayor sentido para proteger a los trabajadores que estén bajo este riesgo, y a la población en general, en el caso de accidentes caseros o provocados por la naturaleza. La prevención siempre será la mejor solución.
Referencias.
1. Sofi R, Qureshi T, Gupta V. Electric cataracts: a cause of bilateral blindness in Kashmir. Eye. 2018;32(10):1676–7.
2. Delbarre M, Froussart-Maille F. Signs, symptoms, and clinical forms of cataract in adults. J Fr Ophtalmol [Internet]. 2020;43(7):653–9. Available from: https://doi.org/10.1016/j.jfo.2019.11.009
3. Khatib R, Koch KR, Heindl LM. Katarakt nach Stromverletzung Electrical Cataract after Electrical Injuries. Klin Monatsbl Augenheilkd. 2017;234:986–7.
4. Kumawat D, Ramananda K, Sahay P, Kumar A. Posterior capsular rupture and spontaneous posterior dislocation of lens following electrical injury. BMJ Case Rep. 2017;2017:1–3.
5. Korkmaz A, Karti O, Zengin MO, Sagban LL, Kusbeci T. Simultaneous Cataract, Maculopathy and Optic Atrophy Secondary to High-Voltage Electrical Shock Injury. Neuro-Ophthalmology [Internet]. 2020;44(1):34–7. Available from: https://doi.org/10.1080/01658107.2018.1540644